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Vivimos un momento en el que muchos profesores de todo el país, de los ámbitos de educación primaria, secundaria y universitaria, imparten sus clases a distancia, ya sea de manera totalmente virtual o mediante un enfoque híbrido. Muchos de ellos se enfrentan a los problemas más variados, que abarcan desde aprender a gestionar las nuevas tecnologías hasta mantener la atención de los alumnos. Todo esto se desarrolla en un entorno donde la seguridad personal es lo más importante, tanto para los profesores como para los alumnos. La enseñanza a distancia es totalmente diferente y constituye una experiencia nueva para la mayoría de nosotros. Pero también nos brinda oportunidades únicas para conectarnos con los alumnos de manera significativa y creativa.

Mujer en Zoom, trabajo remoto

Aquí presentamos nuestros «10 mejores» consejos para la enseñanza a distancia, los cuales incluyen recomendaciones de varios expertos en este ámbito.

1. Anime a las familias a destinar un espacio solo para estudiar.

Hay un antiguo proverbio que dice que «para educar a un niño, hace falta un pueblo entero», y esto se ha visto claramente evidenciado en el entorno de la pandemia en el que nos encontramos. Los padres son socios fundamentales durante estos tiempos de aprendizaje remoto. Y su colaboración empieza por encontrar y habilitar un lugar específico para que los niños puedan aprender. «El éxito de los niños con el aprendizaje remoto empieza en el hogar con los padres. Es importante que todos los niños tengan un entorno en casa que sea adecuado para el aprendizaje a distancia, y esto implica, por ejemplo, encontrar un rincón tranquilo», explica Diana Singer, presidenta y fundadora de Diana Singer Education. «Siempre recomiendo a los padres que compren un escritorio para colocarlo en la habitación de sus hijos, de manera que ellos tengan su propio espacio privado. De esta forma tendrán más probabilidades de mantener la concentración, ya que se encontrarán en un lugar tranquilo y sin distracciones».

2. Llegue con tiempo y motive a los alumnos.

Dennis Yim, director de cursos en línea y en tiempo real para Kaplan, sugiere iniciar sesión en la clase unos 15 minutos antes de la hora programada. «Abra la sala y empiece a conversar con los alumnos», aconseja. Pídales que prueben la cámara y el micrófono si los van a usar. «No tiene por qué tenerlos activados usted mismo», añade. «Simplemente, se trata de que llegue temprano a su propia fiesta». Dennis sugiere empezar con una breve conversación, como por ejemplo, preguntando: «¿En qué sala vas a trabajar hoy?». También se puede proponer una encuesta o mostrar una diapositiva: «Cuando oyes la frase [elija algunas palabras relacionadas con su materia], ¿qué te viene a la mente?» Esto, explica, puede ser muy útil para captar el interés y recoger información útil sobre los conocimientos previos de los alumnos.

3. Intente que la enseñanza a distancia sea personal, sobre todo al principio.

No empiece directamente con el tema o el repaso de contenidos. Cuando se reúna virtualmente con los alumnos por primera vez, dedique algo de su tiempo a conocerlos mejor. Cuénteles cuáles son sus aficiones e intereses, además de información sobre su familia, sus libros o películas favoritos, u otra información personal que crea relevante. Pídales que hagan lo mismo.

4. Intente que la clase sea divertida.

«En los cursos de primaria, los niños disfrutan mucho de actividades cortas de acertijos y búsquedas de pistas en medio de una clase virtual», afirma Debbie López, directora de extensión comunitaria de Zivadream, un sitio web de defensa de la educación y de preparación de exámenes. «Estas técnicas refuerzan el aprendizaje, les hacen levantarse de la silla y les aportan un breve descanso físico de la pantalla. Y encima es divertido», añade. Por ejemplo, sugiere lo siguiente: en medio del repaso de la letra de la semana, deténgase y diga a sus alumnos que les dará cinco minutos (o el tiempo que mejor les convenga) para que encuentren algo que tengan alrededor que empiece con esa letra y lo traigan al grupo. Deje que presenten sus objetos por su nombre y pregúnteles si empiezan con el mismo sonido de la letra de la semana. Se puede usar la misma dinámica con números, colores, tamaños, formas, etc. «Una vez que conozcan el mecanismo, puede ampliarlo pidiéndoles que encuentren un objeto con una determinada letra y un color o forma específicos. Le sorprenderá ver cómo reaccionan ante este desafío».

5. Conecte a los alumnos con personas y lugares que de otra manera no hubieran podido conocer.

Invite a otros oradores para que compartan información o hagan demostraciones. Implique a los alumnos en el proceso diciéndoles, con antelación, qué materiales necesitarán para participar. Aproveche las opciones de tecnología virtual y realidad aumentada para ofrecer a los alumnos la posibilidad de inmersión en un entorno o una situación. López sugiere invitar a participantes secretos para que asistan a las clases virtuales. «Puede ser alguien que conozcan, o puede presentarles a alguien nuevo de su comunidad: el carnicero, el bombero, el bibliotecario, el camarero, el agricultor, el dentista, el director de la escuela, el empleado administrativo, la enfermera o la encargada del comedor», recomienda. «En el tiempo dedicado al invitado se puede mostrar una presentación, una entrevista o usar un formato de preguntas y respuestas. Antes de presentar al invitado secreto, puede proponer a la clase un juego de 20 preguntas para ver si logran adivinar quién es», sugiere.

6. Aproveche los recursos complementarios que hay disponibles.

Esta es la sugerencia de Arash Fayz, cofundador y director ejecutivo de LA Tutors 123, una empresa de preparación de exámenes, consultoría académica y clases privadas. «Puede que los alumnos de cursos más avanzados no requieran tantos juegos o descansos para pintar como ocurre con los más pequeños, pero siguen necesitando elementos visuales o de diversión para mantener la atención», explica Fayz. A modo de ejemplo, sugiere usar Hiphughes (videos sobre temas de historia) y Radio Ambulante (podcasts para ayudar a estudiar español). Además, Khan Academy ofrece videotutoriales sobre una gran variedad de temas de todos los niveles, incluso para el nivel universitario. 

7. ¡Llévelos afuera!

Las actividades específicas de aprendizaje remoto pueden variar en función de la ubicación física y del clima, pero los profesores pueden aprovechar la naturaleza y el aprendizaje al aire libre para motivar a los alumnos, incluso durante los meses de invierno.

8. Haga que se muevan.

Jacquelyn Oldham, directora de Diseño Curricular y Desarrollo para The Little Gym, un programa de gimnasia reconocido internacionalmente, ofrece estas ideas:

  • Fiesta de baile. El «baile de las estatuas», o cualquier otra forma de baile, puede convertirse en un juego. «Suba el volumen de la música, muévase y diviértase mostrando sus movimientos de baile favoritos e incluso aprendiendo otros nuevos», sugiere.
  • Carrera de obstáculos en el hogar. Pida a los alumnos que busquen almohadas, mantas, aros, sillas y cualquier otro artículo que puedan encontrar en casa para hacer una actividad de carrera de obstáculos desafiante y divertida.  
  • Lava caliente. Pida a los alumnos que inflen un globo y lo lancen intentando que no toque el suelo durante el mayor tiempo posible. Rételos a comprobar cuánto tiempo pueden mantener el globo en el aire sin que toque el suelo o la «lava caliente».  
  • Yoga de animales. Anime a los alumnos a que se muevan y estiren sus cuerpos para colocarse en posturas divertidas con el yoga de animales. Incluya posturas como la del jaguar, el mono, la tortuga o el perezoso. 

9. Reduzca al mínimo el tiempo de pantalla.

Para los alumnos, sobre todo los más pequeños, pasar demasiado tiempo delante de la pantalla puede resultar abrumador… y aburrido. Pero el aprendizaje remoto no requiere la misma cantidad de tiempo de participación ininterrumpida que el aprendizaje presencial. Considere darles un recreo y pedirles que hagan una actividad de manera autónoma para reincorporarse más tarde.

10. No se preocupe por cosas sin importancia.

La enseñanza y el aprendizaje remotos son algo nuevo para muchos. No espere que cada sesión salga exactamente como la planeó y no se preocupe si necesita cambiar de rumbo varias veces: dele un respiro a los alumnos y a usted mismo. Se trata de una experiencia de aprendizaje continuo para todos nosotros.